Despierta guerrero, es hora de
seguir el camino. Hoy vamos a hablar sobra la trayectoria de uno de los titanes
más grandes que el culturismo ha visto, aquel que se le conocía como el que tenía
las mejores piernas del culturismo, Tom Platz.
Tom Platz nació el 26 de junio
de 1955, a la edad de 11 años, mientras leía la revista Mr. Universe, fue que decidió
que quería dedicarse profesionalmente al culturismo. Y a los 15 años ya pesaba
poco más de 15 libras.
Tiempo después se unió al
Armento’s gym, y fue ahí donde se empezó a familiarizar con levantadores de
pesas olímpicos, tales como Norb Schemansky y Freddie Lowe, quienes fueron los
que le enseñaron la manera correcta de ponerse en cuclillas.
Si bien nunca logró ganar un
Mr. Olympia, si pudo colocarse las veces que compitió dentro de los 10 primeros
lugares, obteniendo casi siempre el tercer lugar.
Como se dijo al principio, el
fue conocido como uno de los culturistas que tuvo las mejores piernas, si no es
que el mejor. El proponía y decía que no era necesario entrenar pierna más de
una vez a la semana, como es normalmente que se entrenan. Él decía que con
entrenarlas una vez al mes era más que suficiente.
Pero esto no significa que esa
única vez al mes iba a ser algo fácil, en realidad es todo lo contrario. Al ser
solo un entreno al mes, este lo hacía parecer un infierno, y vaya que si parecía.
El manejaba 5 series por set, lo cual entra dentro del rango normal, pero el
numero de repeticiones por serie era lo que hacía que sus rutinas se sintieran
mortales, y que te dejaban incluso con ganas de vomitar.
El hacia hasta 40 repeticiones por serie, por ejercicio, lo cual es algo casi imposible, en especial con los pesos el manejaba. Ya que él decía que tenia que ser usado el peso máximo que cada persona aguantara, y hablando de que son entrenamientos de pierna, esto significa una sensación brutal. Incluso en muchas ocasiones el hacia más de 40 repeticiones, se le conoce como la primera persona que en verdad llegaba al fallo, lo cual es realmente muy increíble, ya que la mayoría de las personas llegan al fallo haciendo poco más de 15 repeticiones, y Platz superaba las 40. Ejercicios como la sentadilla y la prensa eran sus favoritos, y sin duda alguna logro convertirse en toda una leyenda dentro de la historia del culturismo.