Despierta
guerrero, es hora de seguir el camino. Como sabes, el objetivo de este blog es
el de guiarte por el camino al olimpo para que logres conseguir el físico de un
dios griego, y existen varias maneras para lograrlo.
La
principal y la más conocida es el culturismo, deporte que puedes practicar en
cualquier gimnasio y que es el más adecuado para logar tus objetivos, pero no
es el único medio para lograrlo, existen muchos otros, de los cuales el más destacado
de estos es la calistenia.
Esta
aparece en el año de 1785, por el profesor de gimnasia Christian Carl André, la
cual poco a poco fue tomando más y más importancia dentro de la industria del
fitness, llegando en tiempos actuales a rivalizar con el culturismo y superando
al crossfit.
Pero,
¿qué es la calistenia? Es un deporte en el cual el objetivo no es solo la de creación
de masa muscular, tal como lo es con el culturismo, sino también la de obtener
fuerza. Esta disciplina consta de hacer diferentes ejercicios, utilizando principalmente
el peso corporal, aunque también en ocasiones se utilizan algunos “aparatos”,
no son tantos como los que se utilizan en el gym para el culturismo.
La
calistenia es un deporte ideal si lo que buscas es obtener fuerza y desarrollar
un buen físico es lo que buscas, aunque no se obtendrá un cuerpo como el que
puedes obtener por medio del culturismo, las ganancias serán de igual manera
satisfactorias. Aunque este deporte exige un nivel aun mayor de dedicación y
disciplina del que puede llegar a exigir el culturismo.
Ya que
uno inicia usando todo el peso corporal, y no eligiendo el peso como se podría hacer
en un gimnasio convencional. Se realizan diferentes ejercicios en los entrenamientos,
los cuales no suelen ser muy parecidos a los que vemos cuando entrenamos en un gimnasio,
aunque suelen ser muy increíbles a la hora de ver a alguien realizarlos.
¿Cuál
es mejor? Como practicante del culturismo, puedo decirte que todo depende de
que sea lo que estés buscando, es decir, cuales son tus objetivos, ya que cada
deporte te lleva por una ruta distinta. Aunque ambos son muy buenos y te permiten
llevar a tu cuerpo a nuevos niveles, solo es cuestión de especificar nuestras metas.
En conclusión guerrero, ambas disciplinas son buenas, y ambas te pueden guiar
por el camino al olimpo.